Cuando era adolescente, Veridiana descubrió que sofría de una enfermedad muy grave: la bulimia. ¡Esta es su historia! A los 16 años, como todas las chicas a Veridiana le gustaba salir y estar con su novio. Era una chica muy feliz, inteligente y divertida pero por dentro se sentía muy infeliz. Nunca le había gustado su cuerpo. Veridiana siempre intentó adelgazar haciendo dietas. Pero sin éxito .Por eso, desafortunadamente, eligió el camino más rápido y fácil. En casa, Veridiana sofría con el divorcio de sus padres y la muerte de su querido abuelo. Por la noche, Veridiana se miaba al espejo y se veía una chica gorda, fea y totalmente indeseada. Cerraba la puerta de su habitación y lloraba. Hasta que un día se fue al bañero y cometió su primer crimen: devolvió todo su sufrimiento y infelicidad. Pasó a hacerlo todos los días.
En el instituto sus amigas pensaban que Veridiana exageraba pero nunca hicieron nada para ayudarla. La enfermedad de Veridiana llegó a tal punto que a la gente les daba miedo tocarle. Desmayaba constantemente. ¡Era el fin!
Un día su madre que estaba muy preocupada intentó hablar con su hija para ayudarla pero no fue fácil. Veridiana no admitía que tenía una enfermedad. Su familia decidió internarla contra su voluntad en un centro de rehabilitación. El proceso fue muy doloroso para Veridiana.
A los dos años de internamiento Veridiana está casi curada. Hoy ella forma parte de un grupo de chicas que intentan ayudar a las personas que sufren de la misma enfermedad. Finalmente se siente bien en su cuerpo y está feliz.
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